Autor: carlota (Página 2 de 2)

Lo esencial es invisible a los ojos

Mientras un piloto intenta reparar su avión averiado en medio del desierto del Sahara, se topa con un pequeño príncipe proveniente del asteroide B 612 que le pide insistentemente si puede dibujarle un cordero.

El piloto comienza entonces a conocer al Principito y sus aventuras en distintos asteroides, los personajes tan raros con los que se encuentra, lo que aprende sobre ellos y la relación tan especial que mantiene con una rosa y un zorro.

-Si vienes, por ejemplo, a las cuatro de la tarde, comenzaré a ser feliz desde las tres.

Un libro que aunque a simple vista cualquiera puede relacionar con un cuento para niños, plantea unas enseñanzas y maneras de vivir que tan solo un adulto puede llegar a comprender. El Principito es muchas cosas, y una historia sin sentido no es una de ellas.

Siempre ha sido discutida cual es la mejor edad para leer El Principito. Y es que no sabes muy bien a quién se dirije el autor, si a los niños del presente o a aquellos que alguna vez lo fueron. De hecho es el propio piloto quien acaba reconectando, gracias al Principito, con aquel niño que fue algún día.

-Jamás ha mirado una estrella. Jamás ha querido ha nadie. No ha hecho más que sumas y restas. Y todo el día repite como tú «¡Soy un hombre serio! ¡Soy un hombre serio!» Se infla de orgullo. Pero no es un hombre; ¡es un hongo!

Cada capítulo narra una enseñanza distinta: la amistad, la madurez, el egoísmo… Pero no es nada aleatorio. Están todas ellas super bien iladas entre sí, haciendo que todo cobre un sentido único.

Me ha encantado.

Su visión del día a día de los adultos, sustituir las cosas que se quieren hacer por las que se deben hacer, la pérdida del niño que se lleva dentro, la importancia de cuidar las relaciones de amistad… Todo.

Un libro que por lo fino que es parece más bien un folleto. Entretenido y fácil de leer, con un simbolismo, valor de personajes e historias simplemente increíbles.

Lo esencial, es invisible a los ojos.

Cartas de amor a los muertos

Laurel tiene 14 años cuando su hermana mayor May muere y decide cambiarse de instituto donde poder pasar página. Allí la profesora de lengua le pone de deberes escribir una carta a alguien que haya muerto. Pero Laurel en vez de escribísela a su hermana se la escribe a Kurt Cobain, que era el cantante favorito de May.

Así mediante estas cartas escritas a personajes famosos que murieron de jóvenes (como Amy Winehouse, Heath Ledger o Judy Garland) y relacionados con algún aspecto de su vida, crea una terapia propia gracias a la cual es capaz de sentirse conectada con su hermana y a la vez desubrirse a sí misma. Junto a las nuevas amistades, la situación de una familia rota y una historietilla de amor, Laurel trata de lidiar con una vida que la mayoría de veces no reconoce.

Kurt Cobain

Tengo muchos sentimientos encontrados con este libro, así que no sé muy bien por dónde empezar. Decidí leerlo porque me aparecieron un boom de reseñas sobre él. La historia me ha recordado bastante a Las ventajas de ser un marginado, solo que Cartas de amor a los muertos va dirigido a alguien en concreto, y pues es como si Laurel mantuviera una conversación con las personas a las que escribe, aunque ninguna de ellas le responda. Al tratarlos de tú a tú es mucho más íntimo y real, y eso me ha gustado un montón porque siempre tendemos a mitificar a las personas famosas, aún más cuando mueren.

Hay escenas donde me han entrado muchas ganas de llorar (en el sentido bonito), y otras en las que la historia era demasiado predecible. Creo que, que no me sorprendiera, ha sido la mayor desventaja. Porque sí, la manera de narrar de Ava Dellaira es muy guay, pero no sé, el argumento me ha parecido más plano de lo que pensaba. También es cierto que hay frases sobre el sentido de la vida que pueden equilibrar la balanza perfectamente.

Amy Winehouse

No creo que a alguien que le guste este tipo de trama en los libros juveniles le vaya a decepcionar, pero he leído tan pocos de este estilo que me ha dado la sensación de ver una historia, evolución y personajes sin casi variación respecto a otros. A lo mejor mi fallo ha sido compararlo, porque tampoco puedo decir que no lo haya disfrutado. Creo que es un libro genial para engancharse a leer o continuar haciéndolo.

«Ya sé que estáis muertos. Pero os oigo. Os oigo a todos. Estuvimos aquí. Nuestras vidas importan.«

Entonces cogía un libro

Cuando era pequeña, tenía una lamparita rosa de princesas. La enchufaba lo más cerca que podía de la cama y por la noche, me esparaba a no escuchar ningún ruido.

Todos dormían.

Entonces cogía un libro (de «Tea Stilton» por lo general) y me ponía a leer o a escribir en una de estas libretas pequeñas que acumulas en los cajones. Mi madre claro está, acabó por darse cuenta y al final me quitó la lamparita. Así que empecé a utilizar una linterna.

Poco a poco me fui enganchando a más y más libros, como «El diario de Greg», «El club de las zapatillas rojas»… y cuando llegó «Harry Potter» ya ni te cuento. Me acuerdo incluso de en la ESO, junto a un grupo de amigas, pasar por las clases del curso y poner a Sebas G.Mouret cada 23 de Abril. Pero no fue hasta que leí un libro en concreto con el que por fin caí:

-Me encanta leer.

No se como he tardado tanto en abrirme un blog. Pero bueno aquí estoy, con muchas ganas e ideas en la cabeza. Espero que os quedéis de vez en cuando a cotillear reseñas, opiniones, adaptaciones…. y que sobretodo, os guste!

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